Antecedentes:
Coalición del Norte. Operaciones en Tucumán.

En los primeros días de septiembre de 1841, Oribe procedente de Santiago del Estero llega a la ciudad de Tucumán. Lavalle que se encontraba en dicha ciudad ha marchado hacia el Sur por un camino paralelo al del aquél. Oribe vuelve entonces hacia el Sur (recorre unos 60 km) ante la probabilidad de que Lavalle ataque a una agrupación federal que venía muy retrasada. Lavalle regresa hacia el Norte. Oribe hace lo mismo, cruzándose con Lavalle que ha vuelto hacia el Sur.
Oribe deja en la ciudad de Tucumán al general Garzón con 600 hombres y vuelve hacia el Sur. El 18 de septiembre ambas adversarios están acampados a orillas del río Famaillá; Lavalle en la margen izquierda. Lavalle efectúa un rodeo durante la noche, franquea el Famaillá aguas arriba del campamento de Oribe y el día 19 forma en batalla interponiéndose entre el ejército federal y la ciudad de Tucumán. No obstante la inferioridad de sus medios se ha resuelto por una batalla de frentes invertidos, desechando la posibilidad de retirarse en dirección a Salta.

Fuerzas en presencia

El ejército de Buenos Aires se concentró durante el mes de junio en Rojas, desde donde marchó hacia Pergamino, cuyos alrededores alcanzó el 6 de septiembre de 1861. el día 16 franqueó el arroyo del Medio y fue a situarse dos Km. al Norte del mismo.
El ejército de la Confederación se detuvo al alcanzar el arroyo Pavón, a fin de ajustar detalles de su organización y, sobre todo, para mejorar la instrucción muy deficientes de su infantería.
Fuerzas adversaarias

Ejército unitario: 70 infantes mal armados, 1.300 jinetes y 3 piezas de artillería.
Ejército federal: 700 infantes, 1.700 jinetes y 3 cañones.

La acción

Duró aproximadamente una hora. En un primer momento al ala izquierda unitaria rechazó una carga de la caballería federal; pero una segunda carga de ésta llevada con mayores efectivos la puso en fuga. Este hecho unido al ataque federal contra el ala derecha motivó la rápida dispersión de esta última. El débil centro del dispositivo unitario pudo oponer muy poca resistencia. Y fue rápidamente aniquilado, resultando infructuosas las cargas llevadas por Lavalle con alguna caballería que había podido reunir.
Los unitarios tuvieron 600 muertos y 480 hombres fueron hechos prisioneros.
Los vencedores los persiguieron encarnizadamente hasta Jujuy.

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